Mercè Saura i Francesc Quílez
El Gabinete de Dibujos y Grabados del Museu Nacional conserva en sus fondos más de cuatro mil dibujos del artista Apeles Mestres Oñós (Barcelona, 1854-1936), de los cuarenta mil que el mismo artista dice que hizo a lo largo de su vida. Desde hace un par de años, el Gabinete trabaja en el objetivo de dar visibilidad a este amplísimo fondo de dibujos y poner al alcance de todos los públicos esta gran acción patrimonial, procedente en su mayor parte de la donación que el artista hizo el año 1934 y de su legado, ingresado en 1951.
En términos cuantitativos, después de la colección Agell, formada por más de 15.000 obras, el fondo Apel·les Mestres es uno de los conjuntos patrimoniales más importantes de la colección del Gabinete de Dibujos y Grabados. Esta cifra muestra la fecundidad creativa de un artista versátil y político, capaz de desplegar una intensa actividad en diferentes disciplinas. Es, por tanto, una poética connotada con un aroma decimonónico, ya que sus intereses se mueven entre la novela romántica, tanto la culta, como las novelas populares por entregas, el costumbrismo, la recuperación del patrimonio catalán medieval o el conocimiento de un coleccionismo que entraña un modelo de época. Por encima de este eclecticismo visual, lleno de hibridaciones, cristaliza en un modelo que rompe con la jerarquía de los géneros y opta por jugar con el factor de la permeabilidad artística, de las tradiciones.
De la misma manera, no duda en incorporar la ficción literaria, o incluso el teatro, como ingrediente de su estética y hace lo propio con las leyendas, mitos, narraciones, cuentos y todo tipo de relatos que nutren el imaginario popular. Sin embargo, estos aspectos no restaban el valor de una aportación original que ha sabido trascender la temporalidad histórica para convertirse en una propuesta sugerente, original, en la que la cultura popular, como contrapunto al elitismo burgués, tiene un protagonismo muy destacado y que no hace distinción entre alta y baja cultura.
El Museu de les Arts Escèniques conserva un conjunto de dibujos -la mayoría de ellos modelos de figurines- que demuestran la participación de Mestres en la composición de escenografías teatrales, entre las cuales sobresale la intervención en la obra Clorinda (1881) del compositor Nicolau Manent (Maó, 1827- Barcelona, 1887).
Precisamente, Mestres está en las fuentes de la tradición popular y, con una fina ironía, como un hito característico de los autores desclasados y bohemios, trastoca los convencionalismos sociales y se prefigura como un artista heterodoxo que inaugura una corriente subterránea, a menudo transgresora e irreverente, que se consolidara con la aparición de la modernidad, vinculada a la inauguración de la taberna de Els Quatre Gats, considerado el gran episodio fundacional de estas nuevas tendencias. Todos estos aspectos subrayan su condición de artista inclasificable.
Este impulso irrefrenable explica su atracción por los nuevos medios de representación artística, como fue el caso del cartelismo, un género del cual, juntamente con Josep Lluís Pellicer (Barcelona, 1842-1901), se puede considerar a Mestres como uno de sus precursores. Sus cuadernos de dibujos, de los que la colección del Museu Nacional conserva un número importante, reflejan el interés por una práctica, de la que él se proclama un gran entusiasta. La prueba es que en una de estas páginas encontraremos referencias, convertidas en esbozos preliminares, de su participación en el concurso público que convocó la marca de cigarrillos París, los años 1900 y 1901. Al lado de los que promovieron el Anís del Mono, o la empresa de cava Codorníu, el concurso se convirtió en una de las iniciativas de promoción artística más importantes de la época.
Desde la ciudad de Buenos Aires, su sitio de residencia, el industrial Manuel Malagrida i Fontanet (Olot, 1864- Barcelona, 1946) convocó un certamen destinado a promocionar la imagen de la marca de tabacos, Cigarrillos París, que Malagrida se ocupaba de manufacturar. El segundo concurso, convocado en 1901, ya tuvo un alcance internacional y, como es conocido, el ganador fue el cartelista italiano Aleardo Villa (Ravello, 1865- Milán, 1906).
Uno de los frutos del trabajo que hemos estado realizando es haber podido confirmar que uno, o puede que los dos, de los dibujos preparatorios, de gran formato, que de este concurso conserva la colección del Gabinete de Dibujos y Grabados, fue realizado por Apel·les Mestres. Hablamos de los dibujos Estudio para el cartel «Los cigarrillos París», que su autor presentó con los lemas respectivos Et Voilà! y, Cleòpatra i Marc Antoni. En la parte superior es visible la etiqueta con la numeración correlativa del concurso, 376 el primero y 375 el segundo.
Estudio para el cartel «Los cigarrillos París», hacia 1901; y Estudio para el cartel «Los cigarrillos París» (Marco Antonio y Cleòpatra), hacia 1900. Ambos dibujos preparatorios para los carteles de Los Cigarrillos París.
Por lo que respecta al primero, no hay duda de cuál es su autoría, ya que Mestres hizo un dibujo, fechado el 26 de julio de 1901, que ya presenta la misma disposición compositiva y que forma parte de uno de los cuadernos conservados en el Gabinete de Dibujos y Grabados.
En el caso del segundo,especulamos con la posibilidad que también se trate de una realización del mismo autor, ya que las características de la caligrafía de la letra de las dos obras son casi idénticas, con lo que nos atrevemos a proponer, como hipótesis plausible, que sea una producción de un único autor. El hecho de que su forma de ingreso a la colección fuese la misma y que los dos, hasta ahora, hayan sido considerados creaciones anónimas, contribuye a dar apoyo a esta suposición.
En una de las imágenes fotográficas conservadas, la que corresponde a una de las salas en las que se expusieron los originales que los artistas habían presentado, se puede apreciar la presencia de uno de los carteles hechos por Apel·les Mestres y que forma parte de la colección del Gabinete de Dibujos y Grabados.
Apel·les Mestres y su contribución a la historia del dibujo catalán
La tarea desarrollada nos ha permitido adentrarnos en el conocimiento de una figura muy singular y también nos ha ayudado a poner en valor su contribución a la historia del dibujo catalán.
Apel·les Mestres nación en Barcelona en 1854 en el seno de una familia culta. El padre, Josep Oriol Mestres (1815-1895), fue un reputado arquitecto. Estudió en la Escola de Belles Arts de la Llotja de Barcelona con grandes artistas, de los cuales el Gabinete también conserva algunos dibujos, como Antoni Caba (57 dibujos), Claudio Lorenzale (816 dibujos) y Lluís Rigalt (264 dibujos), entre otros.
Hacia los 20 años, inició su actividad como dibujante de ilustración, lo podemos ver trabajando por 20 o 30 reales en el semanario La Campana de Gràcia, transformado después de su cierre en l’Esquella de la Torratxa, una de las publicaciones de humor satírico y crítica social de gran relevancia en el mundo periodístico. En este sentido hemos encontrado una cantidad muy interesante de dibujos publicados por las dos revistas, desde cabeceras, almanaques o la composición de escenas variadas con la representación de personajes de actualidad. Personajes a los que siempre supo dar mucha vida, envueltos de motivos cómicos y satíricos que demostraron su gran habilidad, tanto en el trazado como en los textos, llenos de una gran finura y sutileza que revela su manera de hacer culta y educada.
Apel·les Mestres, ilustrador editorial
En el transcurso de la revisión de los dibujos de Apel·les Mestres hemos podido comprobar que en su faceta de ilustrador atendía una multitud de encargos editoriales. A parte de las cuantiosas ilustraciones para revistas y seminarios también tiene miles de dibujos -algunos publicados y otros inéditos- de obras literarias de narrativa y de poesía, así como de cuentos infantiles.
En este sentido, cabe destacar la existencia de un álbum de 28 dibujos para ilustrar la obra El Quijote de la Mancha de Miguel de Cervantes (Alcalá de Henares, 1547- Madrid, 1616), que se le encargó en 1879. Para cumplir con este encargo del editor Joan Aleu i Fugarull (1845-1923), Mestres realizó un largo viaje para conocer las tierras de la Mancha, viaje durante el cual llenó un álbum de abundantes dibujos para la que será su primer gran obra de envergadura. Para ilustrar el mismo autor, Cervantes, se conserva una carpeta con los dibujos destinados a la obra Rinconete y Cortadillo, fechados en 1882.
Otros encargos de obras como ilustrar El Lazarillo de Tormes (obra anónima) realizado en 1882, La dama de las camelias, de Alexandre Dumas, hijo (París, 1824- Marly-le Roi, 1895) alrededor de 1880, La muerte y el diablo, de su amigo Pompeu Gener Barcelona, 1846-1920) (realizados entre 1881-1884), El sabor de la tierruca, de José María de Pereda (Polanco, 1833- Santander, 1906), (hacia 1881) o la serie de cuentos de Charles Perrault (París, 1628-1703), entre otros, no faltan en su repertorio.
Hacemos una mención especial a la obra de los Episodios nacionales de Benito Pérez Galdós (Las Palmas de Gran Canaria, 1843- Madrid, 1920) y la colaboración de Apel·les Mestres como dibujante, de la que podemos encontrar documentación epistolar entre el artista y el literato que data desde el 1882 hasta el 1905, tanto en la Casa Museo de Benito Pérez Galdós, en Las Palmas, como en el fondo del Arxiu Històric de la Ciutat de Barcelona. En relación con las reuniones de trabajo que debían surgir para la ejecución de esta magna obra, existe la curiosidad de un dibujo que Apel·les Mestres estaba haciendo en el momento que la visita de Galdós lo interrumpió. Así lo deja anotado el artista en el propio dibujo con una inscripción en la parte superior derecha que dice «Sesión interrumpida por la visita de D[on]. B[enito]. Pérez Galdós» con la particularidad de que este dibujo está fechado el 12 de julio de 1882. Por lo tanto, podemos concluir que este día el dibujante recibió la visita del literato en su casa.
En cuanto al dibujo que estaba haciendo en aquel momento se trata de un estudio de figuras, del cual es fácil saber a qué episodio debería corresponder.
Apel·les Mestres, también escritor
Si bien es cierto que en el campo de las artes sobresale como dibujante, Apel·les Mestres, hombre polifacético y versátil, también escribió relatos y poemas que él mismo ilustró. En 1882, publica una serie de historias que nombra Cuentos vivos, con una concepción original para su tiempo en el panorama de la literatura infantil y juvenil, y con dibujos que contienen una intesa expresividad en historietas como son El conde Tal (realizados entre 1877-1881), La sonda (dibujados hacia 1879-1881) o Cuatro hombres y un cabo (del 1881).
Otra obra que no podemos omitir es el poema de Liliana, aparecido el mes de diciembre de 1907, que manifiesta el amor por la naturaleza que sentía Apel·les. Un texto poético, de marcado carácter panteísta, decorado por sus propias ilustraciones que representan un mundo fantástico lleno de gnomos, sílfides y otros seres del bosque, de los cuales se han revisado unos 76 dibujos de magnífica ejecución. Sobre el tema, el Museu Nacional d’Art de Catalunya hizo una exposición el año 2005, que fue comisariada por Cecilia Vidal .
Mestres había descubierto el mundo de la estampa japonesa que se había dado a conocer a partir de la Exposición Universal de Barcelona de 1888. La fascinación por el mundo oriental le dejó una clara influencia en las estilizaciones y detalles japonizados ya manifestados en Liliana y que también encontramos en los dibujos para las ediciones de Idil·lis (hacia 1883-1890), o Balades (realizados entre 1882-1900), entre otros. Este entusiasmo por el japonismo lo llevó a coleccionar libros de estampas (algunos conservados en la biblioteca del museo) y grabados de los cuales el gabinete de Dibujos y Grabados conserva 23.
La lista de obras literarias que publicó es muy extensa y no podemos comentarlas todas, pero, acabaremos recordando la que dedica a su amigo Alexandre de Riquer (Calaf, 1856- Palma, 1920) en 1908, con ilustraciones propias «La legenda poemática. La Perera» de tema medieval escrito en prosa. Los dibujos están fechados entre 1907-1908 aunque hay que tener en cuenta que Apel·les Mestres en estos momentos ya había perdido gran parte de la vista, proceso que había comenzado a principios de siglo.
El fondo de Apel·les Mestres del Museu Nacional, pronto consultable
Con la incipiente obra gráfica de Apel·les Mestres que se conserva en el Gabinete de Dibujos y Grabados, nos acercamos al final de un largo trayecto que estamos a punto de completar, con la revisión, investigación documental y validación de las fichas de todos los dibujos, para dar salida a la colección mediante su visualización online y que este fondo pueda ser consultable.
Imágenes de la reserva dónde se conservan dibujos de Apel·les Mestres
Poder poner al alcance de todo el mundo un conjunto de estas características supondrá la culminación de un largo proceso de trabajo y contribuirá a difundir uno de los repertorios visuales más desconocidos de todos los que conserva el Gabinete de Dibujos y Grabados.
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Revista Ilustrada del Gran Concurso Universal de Carteles y Segundo de la Serie de los Cigarrillos Paris, Buenos Aires, 1 de gener de 1902 (Fig. Pág. 22)
Los Cigarrillos Paris. Els Concursos de Cartells del Cigarrillos Paris 1900-1901, Olot, 1995
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