El poder conector de la nueva web del Museo del Prado

3 de marzo de 2016

4.886

Conxa Rodà

La nueva web del Museo del Prado es un ejemplo excelente de cómo conectar la colección, el conocimiento y el público. La rica red de interrelaciones entre fichas de obra, imágenes, videos, conferencias, biografías, historia, etc., ofrece nuevas aproximaciones muy enriquecidas y contextualizadas a las obras, los artistas y las épocas. En definitiva, se trata de una web semántica que aprovecha de manera inteligente todo el capital de datos del museo de una manera integrada. Ello se ha conseguido a través de un intenso trabajo interno de depuración y mejora de esos datos y a través de un complejo sistema de arquitectura de datos.

Algunas cifras:

10.000 obras
1.800 autores
20.000 elementos de fondo documental (conferencias, actividades, exposiciones, etc.)
2’8 millones de conexiones

La nueva web se presentó en diciembre. Hemos tenido la suerte de coincidir en el seminario Herramientas digitales para la visita al museo, con uno de sus principales artífices, Javier Pantoja, jefe de Desarrollo Digital del Museo del Prado. Javier accedió muy amablemente a una entrevista para nuestro blog.

Entrevista a Javier Pantoja_web Prado

Un proceso de renovación web no está exento de dificultades. En vuestro caso, además, la ambición de construir una web semántica lo habrá complicado aún más. ¿Podrías explicar un poco el proceso interno que habéis seguido para este gran proyecto?

En el año 2013, el Museo Nacional del Prado publicó su Plan de Actuación 2013-2016, que define la estrategia general del museo. El plan, aprobado por el Real Patronato a propuesta de la dirección, contiene 5 programas de actuación. El quinto es Prado online, que definía la estrategia digital dentro de la estrategia general del museo.

Se consideró necesaria la realización de tres actuaciones fundamentales:

Prado Website
Prado Mobile
Prado Redes Sociales

Prado Website ha merecido mayor atención ya que se consideraba que la web lanzada en 2007 había finalizado su vida útil y se daba por amortizada. Objetivo estratégico: incrementar el acceso, utilidad, difusión y conocimiento de la colección del Museo Nacional del Prado y sus contenidos relacionados así como la actividad general del mismo a través de su web.

¿Fue laborioso conseguir la implicación y la coordinación del trabajo de los diversos departamentos, cada uno con sus prioridades y ritmos específicos?

La coordinación de este proyecto recayó en el Servicio Web y Comunicación online que en ese momento dependía del Área de Comunicación dependiente de la Dirección del museo. Internamente eso implicaba la coordinación entre los diferentes departamentos sirviendo de nexo de unión entre los más centrados en temas tecnológicos y los más enfocados hacia los contenidos. Externamente, la contratación y relación directa con los profesionales y empresas necesarias para llevar a cabo el proyecto (desarrollo de back end, front end, servidores, diseño, UX [experiencia de usuario], definición de concepto, etc). Y, por último, servir de nexo de unión entre estas empresas y los distintos departamentos del museo implicados en el proyecto.

Se establecieron tres fases del proyecto que trabajaron paralelamente e interrelacionadas:

la actualización y adecuación del Sistema Integrado del Gestión Documental coordinado por el Servicio de Documentación y el Servicio de Informática con la coordinación del Servicio Web como base del proyecto
el análisis de UX, las ideas clave, el concepto de diseño, la estructuración de contenidos y prototipado, así como el estudio navegación y usabilidad para terminar con la maquetación del Front End realizado por un equipo de diseño y UX externo junto al Servicio Web
la semantización de la base de datos documentales, web de datos estructurados y CMS (gestor de contenidos) semántico realizado por una empresa externa. Este último proceso culminó con la presentación del Grafo de Conocimiento del Museo del Prado.

Dedicar 3 años a depurar, mejorar, completar los datos es muy meritorio. No siempre se entiende que invertir tiempo en la calidad de los datos ¡es crucial para una web robusta y útil! ¿Puedes explicar un poco el trabajo de los documentalistas para la web?

En los últimos 10 años el Museo del Prado, a través del Servicio de Documentación y el Servicio de Informática, ha estado trabajando en la puesta en marcha de un sistema integrado de gestión documental (SIGMA) a partir de las bases de datos existentes en los distintos departamentos que trabajan con las colecciones (Conservación, Registro, Restauración, Archivo Fotográfico, Exposiciones, etc.)

La idea matriz de todo este proceso era no sólo vincular entre sí estas bases de datos sino lograr que todos los procesos de trabajo internos del museo pudieran transformarse en información relevante sobre las obras.

Con la mirada puesta ya en la nueva web, el trabajo durante estos tres años ha sido convertir ese sistema de gestión documental en la base del nuevo website:

sincronizar sus bases de datos con el gestor de contenidos
analizar la información que contiene como posible generador de contenidos y contextos relacionados
convertir esas bases de datos en un grafo semántico que genere conocimiento y pueda ser interrogado por el usuario

La labor de los documentalistas es esencial en la web actual ya que su trabajo continúa siendo la gestión informatizada de la documentación que genera el Museo del Prado sobre sus obras pero lo mismo podríamos decir por ejemplo del Archivo fotográfico o de otros departamentos que producen o recolectan información. Con la nueva web esa información no sólo genera conocimiento interno o para investigadores sino que es accesible para todo usuario web gracias a la sincronización entre bases de datos y el sistema semántico de gestión de contenidos.

Esta es una web muy enfocada a facilitar la navegabilidad y la usabilidad. ¿Implicasteis al público en el proceso?, ¿se hizo algún testeo previo con usuarios? (card sorting, eye-tracking, focus grupos…)

Comenzamos el proyecto con una fase de comprensión y definición, aplicando ciertas herramientas de análisis al alcance de los profesionales de UX (experiencia de usuario). La primera técnica fue el análisis etnográfico, con el objetivo de estudiar el comportamiento de los visitantes dentro del museo, tratando de no interferir en sus acciones, usos y costumbres. Más allá de esta observación pasiva, realizamos miniencuestas directas a determinado tipo de visitantes. Esta técnica, sumada a otras de data gathering, nos ayudó a conocer mejor al visitante físico. Con todo, era el usuario digital del Prado de quién teníamos que conocer sus necesidades, expectativas y barreras. Y para ello utilizamos otra técnica UX creada por Alan Cooper, la creación de personas.

El equipo de Diseño/UX junto al equipo encargado del desarrollo del proyecto en el museo, definió hasta 15 fichas/perfiles de arquetipos de personas –desde un profesor de Educación Secundaria, hasta una familia de turistas europeos, pasando por un ama de casa o una estudiante de arte norteamericana–; recreando personalidades detalladas a el terreno de perfil de usuario, para poder enfocar más el target de la web y ayudarnos en la toma de decisiones de diseño, estructuración de contenidos, navegabilidad, concepto, etc.

Los usuarios pueden construir sus propios itinerarios y compartir. El apartado “Mi Prado” permite personalizar los contenidos. Pero creo que no hay un espacio en la web para la participación colaborativa, para acoger contenidos generados por los usuarios. ¿Está previsto en un futuro?

En la fase de análisis vimos que los usuarios desarrollaban una participación muy activa en redes sociales y decidimos incluir esa participación en la propia web del museo en el canal Actualidad. La conversación generada en redes sociales –Twitter y Facebook– se considera como parte de la actualidad del museo al mismo nivel que una actividad, un programa educativo, la publicación de un video sobre una conferencia o una exposición, etc. Creemos que este aporte es novedoso al incluir al mismo nivel las aportaciones de nuestros seguidores en la actividad del museo. Desde las redes sociales hemos llegado a tener un flujo de información muy interesante y un importante feedback. Por ejemplo, se han llegado a modificar cartelas en sala por el aporte de nuestros seguidores por no hablar de contenidos de la propia web.

Por otro lado, Mi Prado pretende ser un canal en el que sea el usuario el que condicione su uso a partir de una funcionalidad sencilla: creación de itinerarios online sobre las obras favoritas. Esto abre un campo de posibilidades en función del perfil de usuarios: educativas, visita, investigación.

¿Algún contenido, alguna funcionalidad que estuviera planteada en un principio y quedó descartada por el camino? ¿Qué dirías que os ha quedado pendiente para otra fase?

Ahora estamos en la fase de asentar y analizar lo que hemos lanzado hace un par de meses. Tras esa fase de análisis en la que valoraremos la respuesta de los usuarios, iniciaremos una nueva etapa en la que evolucionaremos el proyecto en función de esta respuesta y de los intereses del museo.

En el terreno institucional creemos que realizando este proyecto hemos cumplido las exigencias que nos imponíamos desde el Plan de Actuación y, por tanto, desde la estrategia digital. En el personal o del equipo implicado en el proyecto es lógico pensar que siempre nos queda la duda de si deberíamos de haber hecho más, si hubiera sido posible, cómo lo hubiéramos hecho, etc.

Pendiente queda mucho:

seguir ampliando obras que se muestran de la colección
seguir ampliando y actualizando la información sobre las obras
generar mejores contextos en la propia web a la información que el usuario busca, continuar en la labor de ampliar
definir con más especificidad el grafo de conocimiento del museo, etc.

¿Alguna frustración? ¿Algún error que si tuvieras que volver a empezar ya no cometeríais?

¡Todas las que se puedan imaginar y ninguna en concreto! Un proyecto así, sin ánimo de magnificarlo, es una experiencia profesional muy intensa que roza la experiencia vital para todos los implicados directamente en él. Son años en los que trabajas con un objetivo a largo plazo que has de ir contemporizando. Surgen dudas, tensiones y frustraciones cada día que han de superarse para llevar el proyecto a cabo.

¿Qué recomendarías a otros museos –pequeños, medianos– sin los recursos humanos, tecnológicos y económicos de un gran museo, que quieran iniciar su viaje en Linked Data?

No sé si me corresponde hacer recomendaciones a otros museos en los que desarrollan su trabajo, no siempre en condiciones óptimas, compañeros por los que siento un enorme respeto. Trasladar la experiencia del Prado en un proyecto de este tipo a otra institución con recursos o tamaño diferentes es complejo porque es evidente que hay que contar con unos recursos materiales y humanos de los que no siempre se dispone.

Enfocar un museo hacia lo digital no es sólo una cuestión de actitud sino también de medios. Diría que como primer paso, lo más relevante es la digitalización y documentación informatizada de tus activos como museo. Luego, hacer posible que lo digital sea parte de la estrategia general de la institución. Y, por último, buscar alianzas internas y externas, en este caso en el linked data, para desarrollar un trabajo que si no tiene o puede ser completo, sí puede ser incipiente.

Proyectos de futuro en digital en el Prado

Como decía antes, estamos ahora en una fase de análisis de lo realizado. Evidentemente sabemos hacia dónde queremos ir pero preferimos contrastarlo con los usuarios para ver si lo que suponemos que precisan es lo que realmente quieren. Por otro lado, intentaremos profundizar en las posibilidades que nos ofrece el hecho de tener una web semántica de datos estructurados, un grafo semántico, etc., y las posibles explotaciones de esta tecnología que, a priori, son muchas y no exclusivas de un entorno web.

¡Muchas gracias, Javier!

Habéis construido una magnífica web, que invita a sumergirse en sus múltiples capas de navegación. Felicitamos con entusiasmo a los colegas del Prado por su labor. Un paso muy significativo en el Linked Data, hacia el que los museos nos debemos ir encaminando.

El proyecto ha sido seleccionado entre las ponencias que se presentarán en el próximo congreso Museums and the Web, en el que nuestro museo tenemos el honor de ser parte del comité de programa y del jurado de sus premios Best of the Web.