El día 6 de febrero de 2012, justo un mes después de empezar una nueva etapa como director del Museu Nacional d’Art de Catalunya, tuve la primera reunión con Joan Colom. En julio de aquel mismo año, su archivo completo ingresaba en el museo como donación del artista, y solo un año y medio después, en diciembre de 2013, inaugurábamos una gran exposición antológica de toda su obra, la parte más pública y visible de un gran proyecto que culmina ahora con la publicación del libro-catálogo del fondo.
Portada del libro-catálogo Yo hago la calle. Joan Colom, fotografías 1957-2010.
No puedo más que estar enormemente agradecido por haber tenido el privilegio y la suerte de participar personalmente en este proceso, tan concentrado en el tiempo pero a la vez tan intenso, que ha resultado en una experiencia de gran valor personal.
El museo ha llevado a cabo la exposición con todo el rigor y la exigencia necesarios en un plazo de tiempo que solo se puede calificar de récord, con tal que, como nos pidió literalmente, Joan Colom estuviera a tiempo de verla. Tenemos que agradecerle especialmente su confianza en el museo y en los dos comisarios de la muestra, David Balsells y Jorge Ribalta, que han realizado un trabajo extraordinario. Es importante señalar como, quince años atrás, ya fueron ellos mismos quienes iniciaron el proceso de recuperación de la obra de Colom con la exposición que el Museu Nacional le dedicó en 1999.
Joan Colom (en el centro) en el museo en la presentación a la prensa de la donación de su obra, julio de 2012.
Joan Colom es un fotógrafo excepcional. Ha realizado una obra de una calidad extraordinaria y nos ha dejado un corpus de trabajo minuciosamente organizado y ordenado por el propio artista. Un archivo que, como bien indican los comisarios, desborda a su autor y se convierte en narrador de toda una época y resulta también de vital importancia para entender otras experiencias en las que Colom participó con otros fotógrafos.
Joan Colom no es un autor fácil y parte de su trabajo tiene condiciones problemáticas, que forman parte de su grandeza, y que hay que abordar como parte de la cultura y de la época en la que está inscrita su obra. Lejos de huir de las dificultades –haberlo hecho sería traicionar a la obra de Colom– la exposición las afronta directamente y nos invita a la reflexión.
Esta exposición es también un paso adelante más en el fuerte compromiso del museo con el patrimonio fotográfico. Este proyecto es, en este sentido, modélico para el museo, que puede ofrecer la exposición antológica de uno de los fotógrafos más destacados del país y a su vez incorporar el conjunto de su obra al patrimonio público, para hacerla asequible a especialistas, estudiosos y a la sociedad en general.
Quiero agradecer, una vez más, a Joan Colom, a sus hijas Carme y Montse y al resto de su familia, su confianza, generosidad y entusiasmo por el proyecto.
(texto extracto de la introducción de Pepe Serra en el libro-catálogo de Joan Colom, 2014)Enlaces relacionados
El fotògraf Joan Colom fa donació de tota la seva obra al MNAC
Director del Museu Nacional
