Teresa González
Resumir o destacar el programa dirigido a los centros escolares sin caer en el marketing educativo no es fácil. El arte como herramienta para pensar el mundo, la creación artística que irrumpe en las aulas y sacude la práctica docente, y la creación de comunidades son algunos de los objetivos que están en el trasfondo del programa educativo del Museu Nacional. A continuación presentaremos algunas propuestas que invitan, a quien quiera y según el tiempo de que disponga, a acercarse al museo a través de la mirada caleidoscópica que nos permite la educación artística.
El arte para pensar el mundo
¿Alguien se ha planteado alguna vez mirar la colección de Arte Moderno en clave de mujer o se ha preguntado cuál fue el papel de los artistas durante el conflicto de la Guerra Civil española? Dos nuevas actividades escolares permiten contemplar la colección desde estos puntos de vista.
Mujeres y modernismo descubre a los estudiantes el rol de la mujer en la sociedad de finales del siglo XIX, a la vez que la sitúa en el contexto artístico de aquel momento.
Del mismo modo que actualmente los artistas toman conciencia de su papel fundamental en el rechazo a todo tipo de conflictos, incluidos los bélicos, los artistas que vivieron la Guerra Civil española participaron de varias maneras. La actividad Arte y compromiso, respuestas a la Guerra Civil es una propuesta que acompaña a la mirada de los jóvenes por un itinerario que les permite descubrir las múltiples respuestas de los artistas al conflicto: la lucha en el frente, el exilio, el compromiso con la propaganda o la necesidad de evasión de una realidad tan difícil. Y también plantearse una reflexión y dinamizar el diálogo en torno a las ideas de justicia, compromiso, paz.
El compromiso con el territorio
Las propuestas que configuran el programa educativo toman toda su fuerza si además se vinculan al territorio, y eso es lo que pasará con una actividad que a partir de este año se llevará a cabo en el Museo Cau Ferrat de Sitges. Estamos hablando de La hora Azul. Conocer a Santiago Rusiñol. Sitges y el Cau Ferrat nos harán vivir la figura de Santiago Rusiñol, recorrer sus calles y adentrarnos en lo que fue su casa para conocer la colección y descubrir el personaje, el artista y el literato. La actividad acerca el personaje a las escuelas del territorio para que lo hagan suyo.
El proceso de creación entra en el aula
De un artista, Santiago Rusiñol, que conocemos a través de su legado patrimonial, a una artista en activo reconocida internacionalmente, Andrea Michaelsson (BTOY), que durante este curso desarrollará un proceso de creación junto a los alumnos de un instituto de Barcelona. Estamos hablando del programa Creadors en residència que en esta tercera edición, en la que somos mediadores, cuenta con la participación de la muralista BTOY, que trabajará junto a los alumnos de 3º de ESO del Instituto Domènec i Montaner. El proceso de creación se irá desarrollando a lo largo del curso y se presentará al público durante el mes de mayo de 2016.
Una comunidad de aprendizaje entre la escuela y el museo
El programa educativo también se extiende en el tiempo y crea comunidad: comunidad de alumnos, docentes y creadores; comunidad de alumnos, claustro, familias e institución cultural. Esta última es la que ha nacido del proyecto Escuelas Tándem. Es el tercer año que el museo y la escuela Miquel Bleach nos sumergimos en un tejido de relaciones y acciones que rebasan el concepto más comercial de productividad y consumo del trabajo educativo, para pasar a priorizar el tiempo pausado, el desarrollo de complicidades y sinergias compartidas. En este sentido, siguiendo los objetivos consensuados con la escuela, estos años de trabajo y diálogo están sirviendo para hacer cambios metodológicos y estructurales en las prácticas docentes. El desarrollo del trabajo por proyectos a partir del arte, que este año se centra en la búsqueda de El deporte y los juegos olímpicos, y la implementación de las estrategias de pensamiento visual son los más destacables.
Trabajo en red y conocimiento compartido
Comunidad, trabajo en red, grupos de trabajo que facilitan el desarrollo del conocimiento compartido y que ponen en relación experiencias. Este curso, el Institut de Ciències de l’Educació de la Universitat Autònoma propone a seis museos de arte de la ciudad de Barcelona -entre ellos el nuestro-, desarrollar un programa de talleres formativos en red: Arte, museos y escuela. Creación y conocimiento, que comenzarán en febrero de 2016.
Además, estamos en contacto con la Red de recursos educativos por la paz, el desarrollo y la interculturalidad Edualter para poner en común el trabajo realizado en el diseño de la actividad Arte y compromiso. Queremos iniciar posibles colaboraciones que tengan en cuenta el patrimonio del museo como recurso didáctico y formativo para el desarrollo de las competencias de la Educación para el Desarrollo.
Todo esto es el programa educativo, pero es mucho más: emoción, complicidad, compromiso, crítica…
Enlaces relacionados
¿Qué hace un artista como tú, en un instituto como este?
Educar a través de las artes. El reto del Tándem de la Escuela Miquel Bleach y el Museu Nacional d’Art de Catalunya
Departament d’Accessibilitat i Inclusió